sábado, 19 de enero de 2013

Corrupción hasta la muerte.

Hasta cuando las personas dejarán de dedicarse a la política para enriquecerse, bien está que vivan dignamente, pero lo que pasa en este país desde hace ya mucho tiempo, no tiene nombre.
Desde los tiempos de Felipe Gonzalez, con los casos Guerra y Filesa a finales de los años ochenta, todo ha sido llenar las arcas de los partidos políticos y de camino muchos se han llenado también los bolsillos.
De todas las formas imaginables, cobrando comisiones a las empresas, dando subvenciones a empresas que sólo existen en el papel, incluyendo a los amigos en los ERES, contratando servicios que después no se dan, privatizando servicios para después hacerse con la concesión, dando las obras a cambio de dinero, y un sin fin de corruptelas inimaginables.
Y no se libra ningún partido, ni de izquierda ni de derechas, ni local, ni autonómico, ni nacional.
Pero lo malo es que ninguno reconoce lo que hace, en cuanto se destapa algún caso de corrupción todos empiezan a pedir dimisiones y responsabilidades al corrupto, y mientras se quitan de encima sus propios casos de corrupción.
Estos señores piensan que los españoles somos tontos y creo que en parte llevan razón porque aquí todo el mundo habla y critica pero nadie hace nada, y como eso lo saben los políticos, aguantan como pueden el chaparrón, y a esperar hasta que pase.
Habría que darles un buen escarmiento y eso la única forma de hacerlo es votar en blanco en las próximas elecciones.
Estoy jarto del Pp, Psoe, Iu, Ciu, Cdc y del resto de partidos políticos.

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