Cohecho impropio

En una pasada feria de Jerez la ministra de Fomento acompañó a la entonces alcaldesa Pilar Sanchez a dar un paseo por el recinto. Después de estar en varias casetas recalaron en una, cuyo nombre voy a ocultar, donde fueron invitadas por algunos de los miembros de la peña que monta la caseta, y allí se formó el lío, es decir ellas y sus acompañantes se sentaron en unas mesas y los correspondientes guardaespaldas en otra y empezaron a pedir comida y bebidas sin parar, con gran asombro de los que los habían invitado. Me contaban que todos parecía que estaban hambrientos y comían con gran ansia, la misma Pilar Sanchez dijo que como esa caseta ninguna, ya que en las que habían estado antes se habían limitado a darles una copa de vino y nada más. La sorpresa se la llevaron después los invitadores cuando, tras irse tan egregios invitados, les presentaron la cuenta que ascendió a unos 1300 euros y que tuvieron que pagar entre todos. Menuda cara dura tienen los políticos, además del buen sueldo que tienen luego quieren que todo el mundo los agasaje.